Los procesos y experiencias de aprendizajes significativos son parte de las vivencias de nuestros y nuestras estudiantes de Segundo Básico, en la cuales integran sus aprendizajes para darles sentido a lo que van aprendiendo en nuestras aulas.
En este contexto e integrando los objetivos de aprendizajes, es que la festividad mapuche “Wiñol Tripantu” inspira los procesos de aprendizaje y evaluativos del tercer periodo en este nivel, dividiéndolo en significativas etapas, según la estación del año y el significado que este pueblo y cultura le atribuye a cada una de ellas.
Partimos en la estación del año Pewü (primavera) nuestra primera etapa, aquí nos preparamos para florecer y así caminar juntos hasta la segunda etapa. Walüng (verano) la segunda etapa, donde recogemos el fruto de nuestro aprendizaje, pensando en el término de nuestro año escolar, para entrar al Rimü (otoño), nuestro tiempo de descanso (vacaciones), y posteriormente Pukem (invierno), donde la tierra se retrae y junto a la lluvia se prepara para volver a sembrar.
Cada niño y niña vivió las etapas a sus propios ritmos y procesos, junto a trabajos colaborativos, individuales y con acompañamiento directo de sus profesoras, autoevaluando cada momento y experiencia.
El “Wiñol Tripantu” como cúlmine de este proceso, dio un cierre cercano, reflexivo y trascendente, el que fue muy valorado y vivenciado por las niñas y niños, quienes en representación de cada curso plantaron en su patio un árbol. Lo que para ellas y ellos refleja una nueva etapa, donde la importancia del cuidado para su crecimiento es una experiencia muy significativa.